Una Pipa o Cachimba es un objeto utilizado para fumar. Consiste típicamente en una pequeña

cámara (el hornillo o cazoleta) para la combustión y un tubo (cánula) que termina en la boquilla.

Puede tener varios tamaños. Las pipas se fabrican con una gran variedad de materiales, siendo

los más comunes (según la popularidad de su uso): brezo, maíz, espuma de mar, arcilla,

cerezo, vidrio, porcelana, ebonita, metacrilato y otros materiales menos usuales.

La pipa más común es la que se utiliza para fumar tabaco. Los tabacos para fumar en pipa reciben un tratamiento

que les permite alcanzar matices de sabor no disponibles en otros tipos.

Muchas de las mezclas (blends) usan como ingredientes de base tabacos Burley o Virginia en diversos grados de

curación, a los que se agrega tabacos más "picantes" o con una intensidad o singularidad de sabor mayor. Entre éstos, los

más comunes son La Latakia (un tabaco de sabor intensamente ahumado, curado con humo, originario de Chipre o Siria), El

Perique (un tabaco muy picante quesólo se cosecha y elabora en una pequeña zona de Luisiana) o tabacos Burley y Virginia

originarios de Africa, India o Sudamérica.

Fumar correctamente una pipa requiere conocer mínimamente la técnica. Cargar correctamente el tabaco, encen-

derlo y mantener la pipa encendida con una temperatura uniforme, son prácticas que sólo se dominan con la experiencia.

El cuidado/limpieza de la pipa misma también es de vital mportancia, y demanda bastante tiempo. Es por este mo

tivo que muchos fumadores de pipa consideran que esta actividad constituye un arte, además de una actividad social.

o degustaciones de tabacos. La expresión pipafumador suele usarse para referirse a una persona que fuma tabaco en pipa.

Tradicionalmente, las mezclas provenientes de EE. UU. se elaboran con tabaco Burley de ese mismo origen, a los

que se añaden ingredientes aromáticos para producir unas mezclas más "dulces".

En cambio, el tabaco de estilo inglés se elabora sólo con tabacos Virginia de sabor natural, con el agregado de varie

tales de origen oriental como la latakia. Existen otros estilos, como las mezclas danesas u holandesas, caracterizadas por

producir tabacos aromáticos, fáciles de fumar para el principiante y más "amigables con el entorno" que la mezcla inglesa.

Cargar correctamente el tabaco, encenderlo y mantener la pipa encendida siempre a una temperatura uniforme es

una práctica que sólo se dominan con la experiencia. El cuidado y limpieza de la pipa misma también es de vital importan-

cia y demanda bastante tiempo. Es por este motivo que muchos fumadores de pipa consideran que esta actividad constitu-

ye un arte además de una actividad social. Algunos fumadores suelen agruparse en asociaciones, clubs o foros de Internet y

realizar torneos de fumada lenta o degustaciones de tabacos. La expresión pipafumador suele usarse para referirse a una

persona que fuma tabaco en pipa.

Durante la edad de piedra, se conoció ya un objeto rudimentario muy parecido a una pipa. Otras informaciones más

seguras, procedentes de Africa Central, hablan de una singular pipa "de brasero", constituída por un pequeño cono de are-

na en el que se practicaban algunos orificios laterales. Parece que las anquísimas tribus indígenas hacían fuego en su inte-

rior con hojas de cáñamo y después aspiraban el humo aproximando la boca a los agujeros.

En el Congo los miembros de la tribu Mangú perforaban el meollo de las hojas de banana, obteniendo de este modo

una rudimentaria cazoleta en la que prendían las hojas de Tabaco enrolladas.

La tribu africana Bechuana construía una forma muy primitiva de pipa; se tomaba una rama de madera semicircular,

se la enterraba en la tierra barrosa por un lugar y se la retiraba por otro, un extremo era luego cargado de tabaco y se aspi-

raba el humo por el opuesto. En la también africana tribu Kirgeeze mezclaban tabaco con hierbas, excavaban un hoyo en la

tierra e introducían dicha mezcla, luego en grupo y acostados, muy cerca sus cabezas una de otra, encendían la mezcla e

inhalaban el humo producido.

Residuos de nicotina fueron encontrados en momias egipcias, esto no ha podido ser explicado científicamente.

Excavaciones en el sur de Francia hallaron pipas en hierro, bronce y arcilla de una época cercana al 400 A.C.

Importantes geógrafos de la antigüedad como Herodoto, Strabo, Pomponio Mella y Solinus se refierieron al uso en

el norte de Europa de pequeños tubos para fumar mucho antes de la llegada de Colón a América.

Para Johanes Wilbert la antigüedad de la pipa sobrepasa con certeza los 3000 años, pues atribuye a la cultura olme-

ca (1200-900 A.C.) algunas pipas halladas en México.

La pipa también fue utilizada durante el Imperio Romano, como podemos ver en la fotografía de una lámpara de

aceite de la época una persona desnuda tiene lo que parece ser una larga pipa en su boca; más abajo a la izquierda la imá-

gen de una pipa romana de vidrio; se piensa que no fumaban tabaco ya que a Colón le faltaban todavía muchos siglos para

llegar al Nuevo Mundo.

50.000 A.C. los pobladores de Australia podrían haber comenzado a mascar las siguientes especies de tabaco:

Nicotiana. gossei, N. ingulba, N.simulans, N. benthamiana, N. cavicola, N. excelsior, N. velutina y N. megalosiphon.

Algunos investigadores consideran que el hombre comenzó a recoger tabaco silvestre hace 15.000 años y que ya era

cultivado entre el 5000 y 3000 A.C en una zona de Los Andes donde actualmente se encuentran Perú y Ecuador, allí estaría

el orígen del cultivo. Otros consideran que el cultivo comenzó cerca del 5000 A.C pero en México.

El hombre fumaba desde mucho antes del descubrimiento de América, se sabe que por lo menos se cosechaban

dos especies diferentes de tabaco en el Nuevo Continente, una era la Nicotiana Rústica (América del Norte), un tabaco

cuya hoja tenía un alto contenido de nicotina y que por ser muy amarga era fumada en pipa y también mezclada con otras

hierbas, la otra variedad era la Nicotiana Tabacum (América Central y del Sur), que era mucho más suave.

Ciertos arqueólogos consideran cerca de 4200 años de ocupación de seres humanos en Maraná y el circundante Va-

lle de Santa Cruz (Arizona, EE.UU). Allí en Las Capas entre las importantes piezas arqueológicas recuperadas se hallaron pi-

pas de piedra que aun contienen residuos de tabaco. Historiadores y botánicos mencionan en relación al tabaco la presen-

cia china en el continente americano antes de Colón pero no han obtenido pruebas contundentes que apoyen sus teorías.

Meyen en su "Geografía de las Plantas" menciona que fumar tabaco fue una muy antigua práctica china y que la

prueba principal son antiquísimas esculturas chinas en las que pueden observarse pipas similares a las de su época (1868),

lamentablemente por ser mejor botánico que arqueólogo no pudo probar con exactitud la antigüedad de las esculturas.

No lo apoya el hecho que la práctica de fumar tabaco no se extendió desde China a países vecinos, que en cambio fuma-

ron sustancias narcóticas. Algunos historiadores han expresado que el cultivo y uso del tabaco para fumar en China es an-

terior al descubrimiento de América por Colón, que el tabaco fue llevado al continente americano por olas de emigración

china a través del estrecho de Bering. Quienes lo niegan se apoyan en que no fue descubierta alguna planta de tabaco

nativa de China o en los países vecinos.

A través del arte, la pipa más antigua que se conoce fue hallada en el siglo XIX, un cilindro asirio del siglo VII A.C,

es una representación de un rey que aspira humo de un hornillo redondo a través de un tubo. Pequeños huesos con imáge-

nes pintadas de mujeres fumando en pipa se encontraron en las excavaciones de Herculano (la antigua ciudad romana des-

truída en el año 79 por una erupción del volcán Vesubio).

El tabaco, es una planta originaria del continente americano, de la familia de las solináceas, en la actualidad la es-

pecie más cultivada es la Nicotiana tabacum. Colón observó a los indígenas fumar tabaco usando una caña como pipa, la

llamaban Tobago, le adjudicaban propiedades curativas y la usaban en ceremonias tribales. "Hallaron los dos cristianos por

el camino mucha gente que atravesaba a sus pueblos, mujeres y hombres, con un tizón en la mano y hierbas para tomar

sus Sahumerios que acostumbraban". Así se expresó Rodrigo de Jerez, uno de los marinos de Colón en el primer viaje a

América, cuando descubrió el uso del tabaco por parte de los indios en la isla de Cuba. Fue él quién introdujo el hábito de

fumar en España. La Inquisición lo encarceló por su práctica "pecaminosa".

Durante el viaje de Colón al Nuevo Mundo los españoles observaron como en la isla La Española (actual Santo Do-

mingo) los indígenas utilizaban un objeto en forma de Y para inhalar el humo del tabaco cuyas hojas eran depositadas enci-

ma de una hoguera, el humo producido era inhalado por este objeto que se introducía en los dos orificios nasales.

Los indígenas lo llamaban Tobago, como ya se ha dicho. En el viaje de regreso a España, Colón descubrió dos islas

muy cercanas, llamó Santísima Trinidad a una y Tobago a la otra, de acuerdo con algunos historiadores, porque por alguna

razón le recordó el instrumento que utilizaban los indios para fumar. Para otros historiadores esa isla fué llamada "Bella

Forma" por Colón y el nombre Tobago le fue dado por los ingleses. La palabra Tabaco deriva de tobago, el instrumento en

forma de Y utilizado por los indígenas para inhalar el humo de las hojas de la planta.

Fray Román Pané integrante del segundo viaje de Colón al Nuevo Mundo, aprendió a fumar la pipa de los indígenas

de la Isla de La Española (Santo Domingo - Rca. Dominicana), a él se le atribuye haber retornado a España en 1518 con pi-

pas indígenas y semillas del tabaco, también se ha mencionado que las semillas fueron transportadas hasta España por

Fernando Cortez a petición del propio Fray Pané.

Hawkins introduce el tabaco en Inglaterra y en 1556, Thevet es quien lo hace en Francia. Alemania recibe el tabaco

desde España. Portugal lo envió a Italia en 1560. Egipto lo recibió de los turcos y se que llegó a China desde Las Filipinas.

Antes de la llegada de Colón al Nuevo Mundo el tabaco existía en otras partes del planeta.

En Terra Australis existía una hermana gemela del tabaco, o más bien una serie de parientes -16 exactamente-.

Nicotiana- endémicas de Australia, entre ellas la Nicotiana gossei, la Nicotiana excelsior y la Nicotiana benthamiana...

En todo caso llevaban consumiéndola desde mucho antes que Colón llegara a América.

Los aborígenes australianos mascan el tabaco; secan y pulverizan las hojas y a veces las mezclaban con cenizas de

acacia. Preparaban con estos ingredientes una pasta de un color grisáceo y formaban con ella unos cilindros en forma de

cigarrillos que luego masticaban o se colocaban detrás de la oreja, para que los jugos se absorvieran a través de la piel.

Los indígenas de NorteAmérica que conocieron los exploradores ingleses fumaban una pipa con la cazoleta de un

tipo de piedra porosa roja tallada y largo caño (de cerca de 90 cm). exploradores llevaron muchas de estas a Inglaterra.

gobernador de Virginia) le enseña a fumarlo en pipa, Raleigh posteriormente populariza la pipa de tabaco en Inglaterra.

También proporcionó las semillas de tabaco para la primera plantación de John Rolfe en Virginia traídas desde Trinidad y

Tobago, y también de la región de Varinas (Venezuela). Rolfe llamó a su plantación de Virginia: Varinas, como el tabaco

venezolano y a su tabaco: Orinoco. Raphelengi quizás fue quien obsequió a Raleigh una pipa especialmente fabricada por

los indígenas, la que luego fumó en la Corte inglesa.

Pipas como las que utilizaban los indígenas de Norte América fueron llevadas a Europa para su imitación pero no

pasó mucho tiempo hasta que allí inventaron nuevas formas; en Inglaterra las fabricaron con arcilla, un estudiante inglés la

hizo conocer en Holanda, los holandeses las hicieron de fina arcilla sobre todo en la ciudad de Gouda, en Persia crearon el

Hookah (pipa de agua), en Turquía la pipa Chibouck con cazoleta de espuma de mar o arcilla y un largo caño de hasta un

metro y medio; rápidamente el uso de la pipa de tabaco se extendió por todo el continente europeo y asiático.

Hallazgos arqueológicos durante el siglo XIX en Gran Bretaña y otras partes de Europa y debido a la gran cantidad de

pipas encontradas, especialmente, de pequeño tamaño, hicieron pensar que habían sido usadas antes del descubrimiento

de América y del ingreso del tabaco al continente europeo.

En Inglaterra fueron llamadas "Fairy Pipes", "Celtic" o Elfin Pipes" en Escocia y "Danes" en Irlanda.